Siete sicópatas

Con la canción de Hank Williams Angel of  Death comienza esta película en la que dos asesinos a sueldo que esperan tranquilamente para matar a una mujer van a ser asesinados por el primer sicópata, y cuando la sicópata le tira las cartas a sus víctimas como es su costumbre suena  una canción que hacia siglos que quien escribe no escuchaba: "The first cut is the deepest"  P.P. Arnold

El título de la película obedece al guión que está intentando escribir un alcohólico Colin Farrell (protagonista también de la primera y esplendida película de Martin McDonagh "Escondidos en Brujas" que vi hace un año más o menos).

A escribir el guión le va a ayudar su amigo (el sicópata número 7) Sam Rockwell

que junto al retirado sicópata  número 2  y desde hace años convertido a  la fe cristiana(Christopher Walken) se dedican a robar perros.

 Él sicópata número 7 le roba el perro al novio de la sicópata número uno con la que mantiene relaciones deshonestas, con la mala suerte que el dueño del perrito es el mafioso sicópata número 4 (Woody Harrelson) que llora como un chiquillo al recordar a su mascota perdida.

 Pobrecita la señora que perdió el can del sicópata número 4    

  Y a todo esto aquí faltan sicópatas ¿dónde está el número 3?, pues es un vietnamita inmolador con aspecto de clérigo que acabada la guerra del Vietnam marchó a USA para arrasar a la compañía que mató a su familia.

Los dos que faltan (sicópatas 5 y 6, uno de ellos mi admirado cantante Tom  Waits) llegan a través del anuncio que puso en el periódico el amigo del guionista para así encontrar historias de sicópatas.  Lo que hay que hacer por un amigo....
 Por cierto se pasaron media vida recorriendo el país con el único y placentero objetivo de matar  sicópatas mientras escuchaban música de Berlioz.    

La película es una hilarante comedia que saboreamos entre el guión de ficción de los protagonistas y el guión que escribe el guionista, que es el propio guión  de la cinta, y al que ayudan a elaborarlo sus amigos sicópatas.
La película aún teniendo dosis de Tarantino y del humor negro de los hermanos Cohen es singular, original y distinta. Los actores están..... si es que nada más que imaginar a Sam Rockwell y a Woody   Harrelson de sicópatas entran ganas de verla.
Tambien está en un pequeño papel el incorruptible Harry Dean Staton (siempre le recuerdo en Paris-Texas de Wenders) que hace de cuáquero persiguiendo al sicópata que mató a su hija.

 La música no desentona con la película  Different drum de Linda Ronstadt 
ya buena parte de las canciones de la banda sonora están expuestas aquí ...."Angela Surf City"   The  Walkmen

Hasta el epílogo es original pues cuando aparece el fundido en negro de rigor y empiezan a aparacer los títulos de crédito la película no ha terminado aún (tirón de orejas a todos aquellos que acostumbran a salirse  de inmediato de la sala al terminar la peli jajajajaja), no, Tom Waits aún tendrá algo que decir.   
 Una locura de película...