Tres películas he visto en los últimos días en las que actúa Matthew McConaughey, actor que va creciendo
últimamente de manera exponencial.
La primera “Dallas Buyers Club”, en la que es serio candidato al Oscar,
donde interpreta a un enfermo de Sida
que se queda en los huesos. Por esta interpretación creo que consiguió el Globo
de Oro. La película, normalita, no sería la misma sin él de protagonista.
La segunda “El lobo
de Wall Street” de Martin Scorsese (bienvenida
al gran Scorsese después de su olvidable “La invención de Hugo”)
donde tiene un pequeño papel como mentor de DiCaprio
en su primer día como corredor de bolsa.
Por cierto en Leonardo DiCaprio (cada día me recuerda más actuando a
Orson Welles) tendrá un duro competidor
por el Oscar al mejor actor.
La tercera, una verdadera joya,
es “Mud” de Jeff Nichols donde interpreta a un fugitivo buscado por una
banda donde el jefe es el malo más maloso que os podáis imaginar. La cinta es
una preciosidad porque nos introduce en el mundo de dos chavalitos de 14-15
años que navegan el Mississippi cual discípulos aventajados de Mark Twain.
En
una isla del río conocen a Mud, y desde el primer momento se sienten atraídos
por él. Le ayudan, fascinados por lo desconocido y lo
peligroso, a escapar de la ley y de los matones.
La película, aparte del
entorno donde transcurre, te engancha por el desarrollo de la relación entre Mud y
los niños, sobre todo con uno de ellos. Presenciar los ríos de rosas que
florecen en el adolescente junto a las duras espinas que va descubriendo en el
mundo adulto es impagable en el relato que hace el director.
Después de verla indagué sobre Jeff Nichols y supe que ha
hecho tres pelis hasta ahora, una de ellas ya la vi, se trata de la personal y
apocalíptica “Take Shelter”. Espero la cuarta. Por ahora me quedo con “Mud”.
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