lunes, 2 de septiembre de 2013

Laura



“Nunca olvidaré el fin de semana en que Laura murió…”. Esas son las primeras palabras que se escuchan en la película. ¡Qué comienzo más fascinante! Las pronuncia Waldo, el descubridor de Laura, un prestigioso periodista que con sus opiniones puede descuartizar o elevar a los altares a quién se proponga.
A través de diversos  flashback, que reflejan los diferentes puntos de vista de cada uno de los personajes sobre el asesinato de Laura descubrimos que todos estaban enamorados de ella, y en ese todo, cuando nos imaginamos su estreno en el año 1944, incluimos a los espectadores, al acomodador, al vendedor de pipas y caramelos y a la taquillera que descubrió su tendencia sexual contemplando a Laura. 
A los amigos de Laura, en un  prodigio de síntesis por parte del director, los conoceremos en los primeros cinco minutos de la película. 
Y si todos y todas querían a Laura….. ¿Quién pudo matarla? Esto es lo que se preguntaba el inspector de policía encarnado por Dana Andrews, quien  a medida que escuchaba los relatos sobre Laura sentía como iba aumentando su interés por ella. Y así llegamos a la escena cumbre de la película, la que siempre recordé: El inspector está en casa de Laura, de vez en cuando mira su retrato, está nervioso, empieza a rebuscar en los cajones, va de una a habitación a otra, se sirve un par de vasos  de whisky, se sienta en el sillón, se desabrocha el nudo de la corbata, sigue mirando a Laura…..¿pero es que este tío se ha podido llegar a enamorar de una muerta? 

 Se queda dormido y al despertarse (¿o es que en ese momento sueña?) Laura está allí de pie frente a él…..es eso: Un momento mágico en la historia del cine.  
  Y no cuento más por si alguien no la vio aún.
Destacar a Clifton Webb, el que encarna a  Waldo, creo que fue su debut como actor en la gran pantalla, hasta entonces hacía teatro. Es un personaje que no cae simpático pero al que adora la cámara.  
 El director es Otto Preminger director de muchísimas películas, algunas tan notables como “Anatomía de un asesinato” , “Tempestad sobre Washington” o la menos conocida “Cara de ángel” con una deliciosa Jean Simmons haciendo inusualmente de mala.
Laura es Gene Tierney, mujer guapísima que hizo bastantes películas, aunque ninguna tan notable como esta. Ejemplo típico de una actriz devorada por el personaje que interpretó.
Pdta: Yo también me enamoré de Laura.

No hay comentarios:

Publicar un comentario